Un día de verano, un chico llamado Marcelo paseando por la calle vió en un descampado cuatro carteles del circo y fue a verlos. Venía de clases particulares con el profesor Tamao.
En una roulotte del circo había una chica japonesa que se llamaba Lu ( Luna de Verano).
Poco a poco Marcelo fue acercándose a Lu. Hasta que un día entró en su roulotte. Dentro había un cuadro de un dragón que le miraba fijamente.
A lo largo de los días Lu le contó varios cuentos, cada uno más interesante que el anterior. Correspondían a cada una de las acuarelas que pintaba Lu.
El cuento que más me ha gustado a mi ha sido el del gallo y el gato. Trataba de un gallo que cacareaba con voz de ganso y de un gato que maullaba con voz de perro. Un día estos animales se encontraron, dejaron de estar tristes y fueron muy amigos.
Al acabar el verano Lu se tenía que ir con el circo. Marcelo estaba muy triste. Lu le invitó a comer. Después Lu le pidió a Marcelo que le contara un cuento. El chico le dijo que no se sabía ninguno. Entonces Lu le pidió un sueño y le dió un consejo: que volara.
Cuando Lu se fue con el circo Marcelo le echó mucho de menos.
Aimar (6ºA)
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